LA FUERZA DE LA INCULTURA

(A PROPÓSITO DE LA SUPRESIÓN DE LOS PREMIOS “ÁNGEL GONZÁLEZ” Y “CAMPO DE LOS PATOS”)

El Equipo de Gobierno del PP ha decidido no restablecer los premios literarios “Ángel González”, de poesía, y “Campo de los Patos” de relato corto. Ambos certámenes, puestos en marcha durante el mandato de Antonio Masip como Alcalde, estaban dirigidos a autores noveles jóvenes, y durante más de una decena de ediciones fueron situándose en el mapa de los premios literarios de prestigio en el panorama regional y estatal. Fueron, por ejemplo, uno de los primeros reconocimientos que recibieron jóvenes escritores que, con el tiempo, han confirmado trayectorias creativas muy destacadas.
El premio “Ángel González”, que por sí queda dignificado con el nombre del mejor poeta espa?ol de la segunda mitad del siglo XX, Premio Príncipe de Asturias 1985 y por suerte conciudadano nuestro, tuvo entre sus premiados a autores de proyección, que luego obtuvieron nuevos y mayores reconocimientos, como Aurelio González Ovies (accésit Premio de poesía Adonáis –precisamente el mismo galardón que dio a conocer a Ángel González en 1956 por su obra “Aspero Mundo”-), Javier Canavés (Premio Hiperión de poesía ), David Martínez Vallejo (Premio Calderón de la Barca 2002 de Teatro, del Instituto Nacional de Artes Escénicas y Música) o Jesús Jiménez Reinaldo (Premio Navarra de Cuentos).
Por su parte el Premio de Relato Corto “Campo de los Patos” tuvo entre sus premiados a Josefina Solano (Premio de Narrativa del Ateneo Cultural de Madrid), Adolfo Camilo Díaz, autor asturiano sobradamente reconocido (en dos ocasiones obtuvo el Premio Xosefa Xovellanos) o el propio Juan Manuel de Prada, que es uno de los escritores de mayor acogida en el panorama estatal (Premio Primavera de Novela 2003, Premio Planeta 1997).
A pesar de estas credenciales, que justifican la escasa inversión que suponen para el Ayuntamiento estos premios, el PP ha decidido cerrar definitivamente la puerta a su recuperación. En el pasado mandato, en medio de fuertes críticas, la reducción del presupuesto de la Concejalía de Juventud acabó con diferentes programas, incluyendo estos certámenes; todo ello a pesar de su probada buena acogida y del prestigio creciente de los mismos. El propio Gabino de Lorenzo, en una de las presentaciones de la edición de las obras premiadas de 1996, se?alaba que consideraba “primordial el apoyo municipal al campo creativo cultural de los jóvenes”, reconociendo que estos dos premios “contribuyen al fomento de la creación literaria juvenil”. Parece haber cambiado de opinión nuestro Alcalde cuando permite que su Concejal de Juventud, Gerardo Antu?a, deseche tan alegremente, como lo hizo en la Comisión Social del pasado 25 de agosto, la opción de rectificar el error y volver a convocar estos certámenes. Puede ser que la posición socialmente comprometida de Ángel González moleste a los jerarcas locales; o quizá la denominación “Campo de los Patos” a nuestro gobierno municipal no le agrade por coincidir con el del equipamiento de actividad juvenil que ahora cierran y cuyo histórico inmueble ya estuvo bajo la amenaza de ser pasto de la piqueta.
Por si fuera poco, el hueco dejado por estos premios no ha sido cubierto por ninguna otra clase de oferta sobre promoción de la creación literaria entre los jóvenes. La ciudad de Clarín, Pérez de Ayala, García Nieto o el propio Ángel González parece territorio comanche, en lo que a apoyo municipal a la actividad literaria se refiere. Y es que nuestro Alcalde tiene una concepción de la cultura local de sota, caballo y rey, que únicamente discurre desde el encapsulado espectáculo de élite a la Gloria y Arte “Historia del Toreo” con textos de Pemán, el que puso aquella letra, que mejor no recordar, al himno nacional.
O sea que, por desgracia, sigue vigente la frase de Antonio Machado: “la derecha es la fuerza de la incultura”, al menos así parece ser en Oviedo con actuaciones como la eliminación definitiva de estos premios, si nadie lo remedia.

Publicado en La Voz de Asturias, septiembre de 2003.